Hoy te compartiré algo sucedido en una de mis sesiones de Consejería, le llamaré a esta sesión: Llego el momento de cerrar.
Imagina este momento: Una mujer se sienta frente a mí, con los ojos cargados de frustración y la pesadez de un año que se desvanece sin cumplir sus metas.
Su voz, un susurro cargado de desilusión, me cuenta la historia de años de sueños incumplidos, de una lucha constante por tener más tiempo para sí misma.
Ella me confiesa que la autoconfianza es solo un eco lejano en su vida, y puedo sentir la carga de años de frustración acumulados sobre sus hombros. Las preocupaciones financieras la ahogan, las reclamaciones de sus hijos la persiguen, y su esposo, frustrado, le lanza palabras que resuenan en su mente cansada. Siempre malhumorada, siempre agotada, y la comunicación con su esposo y sus hijos se ha vuelto un laberinto sin salida.
En medio de este mar de emociones, decido llevar la conversación a un territorio diferente. "¿Qué día naciste?", le pregunto. La respuesta fluye, y yo, con una sonrisa, le comparto la revelación: "Este año estás en tu año personal 9". Por supuesto ella me ve con cara de ¿Qué?, y me dice: ¿Pero que tiene que ver mi fecha de nacimiento, con que yo me sienta así?.
Le explico que este es un momento de pausa, un llamado a reflexionar sobre los últimos 9 años, incluyendo el presente. Todos vivimos ciclos de 9 años, cada uno con metas específicas por cumplir. Es tiempo de hacer un recuento y prepararse para cerrar este ciclo de manera armoniosa.
Entonces, le propongo algo aparentemente sencillo pero poderoso: escribir. Le entrego una hoja en blanco y le invito a plasmar en ella los detalles de lo que su mente ha estado pensando últimamente. Crear un mapa de sus pensamientos nos ayudará a poner orden en el caos y a comenzar a revisar en qué aspectos enfocarnos para cerrar este ciclo y abrir la puerta a uno nuevo, con un plan y acciones definidas.
"Estoy aquí para acompañarte en este cambio", le aseguro. "Comencemos por explorar tus pensamientos más profundos. A partir de ahí, trazaremos juntas un camino que te permita cerrar este ciclo de manera satisfactoria y dar paso a un nuevo capítulo lleno de posibilidades".
La mujer asiente, una mezcla de esperanza y desafío en sus ojos.
Esta historia, por supuesto resuena en mi corazón, mucho de lo que ella siente, lo sentí yo y estoy segura que si ponemos acción su vida mejorará.
Ella podrá cerrar este capítulo con gratitud y lo dejara atrás, lista para escribir una nueva historia, llena de metas alcanzadas y un renacer personal que desafiará cualquier límite.
Si a ti también te resuena algo, comienza a poner tus pensamientos en orden.
Nos leemos en el próximo Blog, te abrazo !!!